martes, 13 de noviembre de 2012

"Lo educativo" en Educación Social. Por Francisco Pacheco Rubio


La dificultad para entender “lo educativo” de un acto, está produciendo en los educadores una confusión muy peligrosa a la hora de educar a las personas. Lo primero que habría que preguntarse cuando se va a realizar una intervención educativa es preguntarse, ¿Qué es un acto educativo? Violeta Núñez (2003) señala, en principio, que el acto educativo es “la realización de un pacto entre generaciones, un acto de justicia. Se trata de la garantía de a los nuevos se les va a hacer un lugar en el mundo” y continua exponiendo que además “es un acto de generosidad y de justicia” concluyendo que “cuanto más se reparte más se acrecienta” (p.356)

¿Qué pretende la educación social? La educación social nace como medio para dar respuestas a las carencias del sistema educativo formal, la escuela, o para complementar actividades para múltiples proyecciones, por lo tanto, podemos deducir, que dependiendo del funcionamiento del sistema educativo formal, la educación social trabajará en unos ámbitos u otros. Belda Ibañez (2009) afirma que la educación social “cubre un amplio abanico de propuestas y acciones que pretenden tanto prevenir el conflicto social como recuperar, reorientar, ajustar e –incluso en ocasiones- producir cambios sociales potenciando la participación ciudadana” (p.28-29)



Una vez que delimitamos que es un acto educativo, y lo que se pretende con la educación social, intentaré dar mi opinión acerca de lo educativo en la educación social.
La educación social es la ventana a un mundo lleno oportunidades, intenta dar respuestas a las carencias, ayuda a integrar, evitar el conflicto social y producir cambios sociales.
Se puede entender de dos maneras, desde una posición asistencialista, trabajar sobre usuarios, que consiste en evaluar las necesidades y asistir, sin que ello produzca una transformación positiva en las personas. Se da sin buscar respuestas, solo se sigue un programa. La otra posición, y la que más me gusta, trata de emancipar al ser humano de promover su autonomía, de romper con las ataduras para progresar, trabajar con personas singulares, empatizar y respetarlas para poder realizar con cada una la mejor intervención para aumentar la libertad, capacidad interior que nos permite dar respuesta a nuestras emociones, sentimientos y pensamientos, de cada uno.

La preocupación por el educando es la diferencia entre estas dos posturas, para educar se necesita construir una relación de disparidad, que no de jerarquizar, el educador posee algo más que el educando pero no está por encima de él. Por lo tanto la educación se construye a lo largo del tiempo. Es un acto de generosidad y justicia puesto que trasmitimos valores a los recién llegados, como diría Hannah Arent.
La cultura es una idea clave insertada en la educación, el bagaje cultural es una carga muy importante en cada sociedad para que entienda que es educativo. Advertir que muchas de las intervenciones que realizamos no funcionan, o no tienen existo, por esta sencilla razón. La cultura es una idea anclada en cada persona, si diseñamos un proyecto para una determinada situación, raramente lo podremos extrapolar a otros colectivos. De la singularidad nace la base de la educación

En principio la educación social fue creada para cubrir necesidades, pero como nos afirma Violeta Núñez (2003) “la educación se sitúa más allá de la necesidad” (p.357). El educador “trata de dejar una suerte de “tierra incógnita” que nos invita a la aventura del trabajo educativo: un espacio abierto a la sorpresa, al acontecimiento” (Núñez, 2003, 357). Lo que se pretende es conocer la historia de cada persona, que se conozca a si misma con mayor libertad y a partir de aquí que realice los actos que considere oportunos.
La educación social, en mi opinión, no tiene como objetivo cubrir necesidades, que me aspen si esto es así, nace como medio para dar herramientas y oportunidades a las personas excluidas o en riesgo de exclusión para que se integren en la sociedad.

En conclusión, lo educativo en educación social, consiste en proporcionar una serie de herramientas complementarias a ciertos colectivos para a través de estos poder ofrecer una serie de oportunidades, quizás nunca imaginadas, para progresar, crecer y dar más libertad.

Francisco Pacheco Rubio
Colaborador del Blog

2 comentarios:

  1. Enhorabuena por tu contribución en el blog. Sinceramente para mi es un orgullo que personas como tú le den vida a este blog.

    Un fuerte abrazo, aquí tienes un lugar donde publicar tus impresiones.

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  2. El sistema educativo en España es nefasto, no se puede crecer y progresar mientras haya la misma prueba para llegar al objetivo marcado, en otras palabras, si el objetivo es alcanzar la cima del árbol, esa prueba solo la podrán superar los gatos, monos y algunos reptiles, un pez o un perro es absolutamente imposible que supere la prueba y llegue a ese objetivo.
    No hay libertad para todos. Un saludo.

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